Por Nelia Rodríguez
En una famosa película sobre un héroe adolescente yo escuche una frase que marcó mi vida.
´´Un gran poder trae una gran responsabilidad´´
Mi abuela me decía que la mujer debe estudiar para no dejarse pisotear de suegras machistas, ni de hombres misóginos y que la mujer preparada no debe hablar como quien defeca y no lo siente.
La boleta del Partido de la Liberación Dominicana en Santo Domingo Este presentó una incuestionable calidad en la rama femenina y todos esperaban que en algún momento la vicepresidenta se refiriera a eso.
Mi madre, quien es una mujer sabia me dijo que Margarita no se podía referir a una mujer en particular, porque le hacía daño a la demás que no mencionara y que de hacerlo debía ser de manera general para darle un impulso al género.
La doctora Margarita no podía referirse a una mujer en particular, porque los demás candidatos y sus seguidores han invertido tiempo y dinero en la campaña y sería sumamente injusto valorar a una mujer en específico.
Faltando semanas para las elecciones, la vicepresidenta con su sonrisa burlona y cara de yo no fui, comete el acto político más imprudente que visto en mi vida.
Le da una serie de puñaladas a mujeres valiosas como la diputada Isabel de la Cruz, la profesora Jacinta Estevez, quien ha dedicado su vida a servir al partido para servir al pueblo, la diputada María Gallard, la joven Escarlet Pichardo y otras mujeres valiosas que estaban en la boleta D del PLD en Santo Domingo Este.
La doctora Cedeño no solo irrespetó a las mujeres del PLD, sino que también golpeo otros candidatos con historia y sacrificios dentro de su partido.
Margarita hizo un spot donde mandaba a votar en Santo Domingo Este por un influencer que se dio a conocer precisamente con un personaje misógino.
Esa falta de respeto a los demás candidatos a diputados de Santo Domingo Este no debe verse como un acto inocente de la veterana política, ni cogerse a chercha como una Hipólito cualquiera.
Desde mi punto de vista el influencer actuo con inteligencia y posiblemente sea un excelente diputado que se gane el respeto de la sociedad, pero ella desde ese día perdió mi aprecio y respeto.